Era la tercera vez que organizaban este festival en la ciudad, y no me lo he querido perder para nada del mundo.
Para ello he ido vestido con ropa blanca (camisa, pantalones y bambas). Y luego para protegerme de los polvos, he traído unas gafas de sol y un gorra.
El lugar indicado ha sido la Rambla del Carmel de Barcelona. Una gran marabunta de gente vestida de blanco (al más puro estilo ibizenco), hemos acudido a la gran reunión de la plaza central.
Allí había un escenario con grupos que tocaban y bailaban las melodías más típicas de la India.
Luego hemos intentado acceder a una de las carpas donde repartían los polvos, pero demasiado tarde, se habían terminado.
Así, que sin previo aviso la gente ha empezado a lanzar los polvos de colorantes y en un abrir y cerrar de ojos me he quedado impregnado de ellos.
Ha sido genial ver como todo el cielo se cubría de estos polvos, que la gente iba lanzando a puñados.
Todos saltando y bailando mientras se iban lanzando los polvos.
Además ha sido un evento de lo más entretenido ya que he coincidido con un gran número de conocidos/ as de Barcelona.
Una experiencia única, que me ha llenado de ganas e ilusiones de viajar a la India.
No hay comentarios:
Publicar un comentario