"Los esfuerzos de hoy son los éxitos del mañana".
Recuerdo esta frase de un profesor de instituto, el cual nos motivaba árduamente a que nos esforzáramos al máximo.
Es una frase simple, pero que tiene su propia lógica y un gran valor.
Muchas veces esperamos a que nuestro futuro mejore por arte de magia.
¿Esperamos quizás a un golpe de suerte?
En pocas ocasiones este llega, o si llega puede que no siempre sea como lo hemos planteado.
Entonces, ¿qué es lo que podemos hacer para alcanzar nuestro sueño?
En realidad, sólo podemos actuar en el presente.
En el día actual. En el ahora.
Son los esfuerzos, las inversiones, o las acciones del ahora las que van a configurar nuestro mañana.
Por ejemplo, si te dices a ti mismo, mañana haré "x", o dejaré de hacer "y"..., es muy probable que repitas una y otra vez el mismo discurso sin pasar verdaderamente a la acción.
El compromiso se consolida en el presente.
Es en el ahora cuando uno realiza los cambios.
Y es muy probable que surjan en tu mente expresiones como:
- ¿Ahora no puedo?
- ¿No dispongo de "x"?
- ¡Necesito "y"!
Y mi pregunta es: ¿Se trata de excusas o son obstáculos reales?
Si son excusas tu decides si creer en ellas o no. Si son obstáculos... si los afrontas hoy mismo habrás iniciado el camino hacia tus éxitos.
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