La psicogeografía es un concepto extensamente utilizado sobretodo dentro de la PNL (sus orígenes parten de esta metodología). Se basa principalmente en la idea de ampliar el mapa del paciente o cliente, haciéndole comprender "que su mapa no es el territorio".
Su uso principal va dirigido a la resolución de conflictos en los sistemas humanos. La psicogeografía como término, hace referencia al espacio (geografía) y a la experiencia subjetiva (psico), espacio que se ocupa tanto mental o físicamente, y la forma en la que se perciben las experiencias (como se valoran desde una u otra posición).
Con la psicogeografía se escenifica el recuerdo y se coloca cada elemento en un espacio (las posiciones que ocuparán en este).
Lo que previamente se trataba de una imagen mental, ahora con los ejercicios de la psicogeografía se convierte en una escena tridimensional que se puede mover y reencuadrar, de manera mucho más eficaz que operando con ella a nivel de la visualización o razonadamente.
Las formas perceptivas son las diferentes formas de analizar, experimentar o vivir cualquier experiencia presente, del pasado o proyecciones futuras (situarse en los espacios mentales más idóneos en cada momento).
Con ellas se pueden apreciar cualquier conflicto, generando como resultado una situación de tensión, agresión o estancamiento en las relaciones.
El hecho de trabajar con las distintas formas perceptivas aporta grandes beneficios. Por ejemplo, en PNL "la ley de requisito de variabilidad" dice que el individuo dentro de un sistema con mayor número de alternativas, es el que controla el sistema.
Las posiciones perceptivas básicas son:
1.- Primera posición: Yo mismo desde mi punto de vista (percepción de mis propias respuestas internas, sensaciones y emociones).
2.- Segunda posición: El punto de vista de la otra persona. Atendiendo a lo que siente el otro ("meterse en la piel del otro"). Podemos ver su forma de comunicación, pensamientos, necesidades... También podemos darnos cuenta de como nos perciben a nosotros.
3.- Tercera posición: Es la del observador (espectador ajeno), el cual puede valorar la interacción de ambos sujetos ("yo" y el "otro", pero sin implicarse emocionalmente (subjetivamente). Se pueden analizar las posturas corporales, los diálogos, reacciones, comportamientos
4.- Cuarta posición: Es la metaposición. Se integra en la observación los tres elementos anteriores: "yo", "otro" y "observador", viendo todo el conjunto y sus interacciones. Te permite evaluar todo el sistema, comprobar cómo vas realizando los cambios de posición perceptiva.
En definitiva una técnica de cambio de posición perceptiva que facilita a aquellas personas que tienen dificultad en ver la vida desde otros ángulos, salir de esas situaciones de bloqueo y sufrimiento.