Fue verlo e ir a probarlo. Navegando por internet descubrí un vale de Groupalia para realizar una sesión de pilotaje de motos de agua.
El precio resultó más barato del habitual ya que dentro de la propia oferta utilicé un descuento que tenía acumulado en la misma web, así que el precio final fue de lo más reducido. Y al día siguiente de la compra me planté en Calella, listo para dejar rienda suelta a mis ansias de velocidad y aventura.
La empresa de deportes acuáticos fue "WaterSports". Su responsable, muy amablemente nos explicó todo el funcionamiento de la actividad. Pudimos guardar bien todas nuestras pertenencias, y nos hicimos con nuestros chalecos correspondientes.
Nos montamos en una lancha y nos llevaron a una buena distancia respecto a la orilla. Allí la moto de agua nos estaba esperando.
El monitor me explicó su funcionamiento (más sencillo de lo que me imaginaba) y a los pocos segundos ya la estaba encendiendo.
Su manejo es más fácil incluso que el de una moto terrestre. Con un botón se enciende y con otro se apaga, y luego tienes el puño para acelerar. Como son motos automáticas no hace falta cambiar de marchas, y para frenar tan sólo debes dejar de darle gas.
Así que empecé primero lentamente a darle gas y me alejé de la barca transportadora. A los pocos minutos ya vi como iba la moto y entonces ya le dí más potencia.
La sensación es brutal, de plena adrenalina, ya que a más velocidad la moto empieza a dar botes. Cada vez te elevas más hasta que llega el punto en que si quieres seguir a la misma velocidad o a mayor, debes alzarte.
La sensación del viento en tu cara, del salpicar de las olas, es increíble. Sientes el rugir de la moto y toda su máxima potencia.
Las normas básicas que te explican son: mantenerte en un extenso cuadrante marcado por unas bóias, y el de no acercarte para nada a la orilla (para evitar choques y daños con los bañistas).
Luego también te explican que en los giros es recomendable abrirse mucho o dejar de dar gas. En mi caso probé de girar rápido, y tienes que tener bastante fuerza y equilibrio para no caerte (si mantienes una alta velocidad).
La experiencia es totalmente salvaje, de libertad y de mucha emoción. Una moto de agua es como un juguete que debes dominar, ya que sino ella te domina a ti.
El monitor nos contó algunas divertidas anécdotas sobre los turistas. Nos dijo que los rusos están muy locos, que deben casi siempre desconectar sus motos a distancia por miedo a un accidente. Y que los franceses no se enteran de casi nada, y muchos acaban casi en la orilla.
Me pasó el tiempo volando, y me quedé con muchas ganas de más.
Para mi ha sido una de las mejores vivencias, totalmente recomendable tanto por la propia actividad como por el centro donde la realicé.
WaterSportsCentre
* Platja Gran de Calella s/n (junto al Club Nàutic Calella)
* Platja de Garbí - Zona 2
08370 Calella de la Costa (Barcelona) – Spain
Telèfons 606.792.955
Web: www.watersportscentre.com
email: info@watersportscentre.com
* Platja Gran de Calella s/n (junto al Club Nàutic Calella)
* Platja de Garbí - Zona 2
08370 Calella de la Costa (Barcelona) – Spain
Telèfons 606.792.955
Web: www.watersportscentre.com
email: info@watersportscentre.com