En la vida existen trucos, métodos, estratagemas para todo o casi todo. Y cuando algo puede ser gratuito, o más barato ¿por qué pagar más por ello? A continuació te expondré toda una serie de opciones de acceso rápido a estos servicios (algunas probadas por fuentes de primera mano).
El hecho de que sea gratuito o de bajo precio no es razón para no tener un respeto acerca de aquello que recibes y de quien lo recibes. ¡Tenlo presente!
1. Leer gratis: son muchas las grandes superfícies, centros comerciales o librerías de gran envergadura que disponen en su sección de lectura de bancos, sofás o lugares donde sentarse. Éstos están pensados para que la gente pueda descansar mientras hojea el libro que se va a comprar. A veces podemos enfrascarnos tanto en la lectura que sin darnos cuenta nos podemos acabar el libro o revista.
2. Siesta en cualquier sitio: hace unos años se pusieron de moda empresas de alquiler de camas para hacer la siesta. En realidad he descubierto que puedes dormir gratuitamente en lugares tan poco esperados como: en el tren, en un lavabo para discapacitados, o tumbado en el césped de cualquier parque público. Siempre guarda tus pertenencias más importantes en los bolsillos (no en bolsas), y en el caso del tren disponte de una alarma en el móvil para no pasarte de parada.
3. Bebidas sin pagar: en las grandes discotecas o pubs musicales siempre existe una barra que es donde se acumula más gente. Para poder acceder a un camarero/ a hay veces que puedes estar esperando más de diez minutos, teniendo grandes dificultades para abrirte paso entre la gente que ocupa las primeras posiciones. Una vez el camarero/ a te ha servido, le haces esperar haciendo como que buscas el tíquet o la cartera. Lo más probable es que para no perder tiempo se ponga a servir a otros. A la que te muevas, dos o tres personas ya te habrán empujado hacia fuera.
4. Actividades para principiantes: cualquier deporte, afición o hobby en el que quieras iniciarte suelen ofrecer una primera sesión gratuita. Esta sirve para que la persona pueda descubrir si le gusta o no aquello a lo que se va a apuntar. No estamos para nada obligados a volver, así que la experiencia ya nadie te la quita.
5. Bares con tapas: en donde yo vivo éstos no son tan frecuentes como en otras regiones del país, aunque sí que existen bares en el que al tomarte una cerveza o bebida te sirven una o dos tapas de acompañamiento. Los más generosos con dos o tres bebidas que te pidas puedes incluso llegar a tener media cena.
6. Vestirse a la última: este es un clásico en el mundo femenino. ¿Quién no se ha comprado un vestido para estrenarlo y devolverlo a los pocos días? Es una buena opción para siempre ir a la moda, aunque es recomendable cambiar de marcas y de establecimientos para no volverse familiar para las dependientas/ es.
7. Ver películas gratuitas: más allá de Internet, los cines siguen teniendo algo insustituible. Sí un día te levantas con ganas de una maratón cinéfila puedes llegar a ver unas cuantas películas por el precio de una. Todo consiste en mirar cuanto dura la película y levantarte cinco-diez minutos antes de que termine para ir a los servicios. Luego vuelves a salir al hall y te apuntas a la siguiene.
8. Cultura al alcance de tod@s: los museos suelen abrir sus puertas todos los primeros domingos de cada mes. Las colas son extensas, pero vale la pena poder dedicar el día a seguir un recorrido cultural y visitar unos cuantos de forma totalmente gratuita.
9. Segunda mano: si no tienes ninguna clase de manía a los objetos usados, sepas que hay mucha gente que compra, utiliza y luego revende objetos de toda clase. Es la mejor forma de seguir dando vida útil a muchos objetos que sino ya estarían en el contenedor. Si buscas bien en Internet o en tiendas de compra-venta, hay muchos que siguen siendo de gran calidad (regalos que no gustaron, objetos poco usados, separaciones que se deshacen de presentes...).
10. Sorteos: continuamente en la radio y en Internet, se ofrecen objetos, viajes o toda clase de tíquets de servicios gratuitos por medio de los sorteos. Sí tienes suerte, buen ojo y eres rápido, quizás seas el afortunado/ a. Es importante tener buen ojo para no caer en estafas, sobretodo nunca les des tu número de tarjeta bancaria.
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