Rueda de energía

La rueda de energía sería una técnica que estaría centrada más dentro del marco de la Psicología Transpersonal o corrientes Humanistas que adaptan la filosofía oriental a Occidente (Mindfulness).

Su finalidad es la de trabajar con la concentración, la relajación, el manejo de la energía y en definitiva realizar una buena "higiene" personal.

Una rueda de energía consiste en un grupo de personas que se unen de las manos, y que dejan fluir entre ellos la energía enfocándola hacia todo el conjunto (como colectivo tenemos muchos más recursos que de forma individual). Así los integrantes de la rueda de energía obtienen un beneficio a la vez que benefician a los demás.

Lo que uno siente cuando participa en una rueda de energía va a depender mucho de lo receptivo que esté. Puede ir desde calor, vibración y a veces incluso visualización.

Sería ideal que cada uno empezara con un trabajo persona de relajación e higiene personal, para de esta forma empezar a concentrarse y a cargarse de energía.

El espacio ideal sería al aire libre, en plena naturaleza, con la la luna llena o con el sol (buscando la comodidad para todo el grupo).

La posición suele ser cogidos de las manos, en corro o estirados en el suelo (tocando pies y manos, simulando una estrella). De esta manera se establece una conexión y la energía fluye a través de todos los integrantes.

Se puede complementar con ciertas visualizaciones como la de imaginar que una bola de fuego crece entre nuestras manos, o el hecho de visualizar un rayo de luz o electricidad que recorre nuestro cuerpo y que se va transmitiendo a los demás (a través de las manos).

Si lo que queremos es que la energía fluya entre los integrantes de la rueda, es más aconsejable la posición con las manos unidas.

Pasos:

1. Se realiza un círculo sin cogerse de las manos.

2. Los pies han de estar paralelos y flexibles (conectados con el suelo), hombros, cuello y cabeza relajados (movimientos de destensar el cuerpo).

3. Cerramos los ojos.

4. Empezamos a respirar (cogemos aire por la nariz y lo soltamos lentamente por la boca).

5. Nos vamos centrando en nuestro cuerpo, las sensaciones, como lo percibimos.

6. Vamos dilatando la respiración y dejamos un margen de 3 segundos en cada inhalación y exhalación.

7. Nos vamos cogiendo de las manos.

8. Seguimos respirando.

9. Nos fijamos en las sensaciones de nuestro cuerpo en contacto con los otros.

10. Podemos imaginar como se genera energía en nuestras manos. Un calor, que va creciendo y que se transmite al otro, y a la vez como recibimos este calor de nuestros compañeros y compañeras.

11. Sentimos como esta energía va creciendo y no sólo está en nuestras manos sino que se transmite por todo nuestro cuerpo.

12. Mantener las sensaciones, y poco a poco cuando queramos ir soltándonos.

13. Compartir la experiencia y la vivencia.